En 1859 Charles Darwin comentó … en Sobre el origen de las especies: “¿Qué puede ser más curioso que la mano de un hombre, formada para agarrar, la de un topo para cavar, la pata del caballo, el remo de la marsopa, y el ala del murciélago, ¿deberían estar todos construidos con el mismo patrón y deberían incluir los mismos huesos, en las mismas posiciones relativas? «Darwin propuso una elegante explicación: estos diversos animales comparten este patrón porque evolucionaron a partir de un ancestro común que poseía extremidades con dedos.
Pero el primer capítulo de esa historia, la parte en la que la mano y la muñeca evolucionaron a partir de huesos en la aleta de un pez ancestral, se ha mantenido turbio en el mejor de los casos porque los científicos no habían tenido fósiles suficientemente completos de criaturas de transición entre peces totalmente acuáticos y tetrápodos terrestres.
Pero, luego de que los restos de una ballena llegaran a las playas de Copenhague, Dinamarca, un grupo de científicos realizó una disección y compartió la sorprendente parte interior de una de sus extremidades. El fósil conserva en sus aletas huesos comparables a los que forman nuestros dedos, lo que demuestra que los dedos evolucionaron antes de que los vertebrados abandonaran el agua. Este descubrimiento anula la sabiduría convencional sobre cuándo y cómo evolucionó la mano y arroja nueva luz sobre el surgimiento de los tetrápodos, un evento fundamental en la historia de la vida en la tierra.
Así, los extraños «dedos» de las ballenas son en realidad una demostración bastante curiosa de las peculiaridades de la evolución.
Ahora revelaron que las ballenas tienen huesos de brazos, muñecas y dedos en sus aletas delanteras. Estos son los huesos de la aleta delantera de una ballena gris. Los dedos largos y se ve similar a una mano humana. En conclusión, sí las aletas de ballena tienen dedos, igual que una mano humana.