En medio de la pandemia por el coronavirus que vive al rededor del mundo, hay un beneficiado y ese es el planeta. Es como si le diéramos un respiro a la contaminación, al medio ambiente y a los animales. Como es el caso de estos elefantes, que fueron liberados de la sillas de tortura en que cada día llevaban turistas.
Desnutridos y encadenados durante horas interminables, los activistas adviertieron que muchos elefantes que manejan en el sector turístico de Tailandia podrían morir de hambre, ser vendidos a zoológicos o ser llevados al comercio ilegal.
Con este nuevo panorama, cerca de 78 elefantes fueron liberados de la esclavitud de las pesadas sillas que utilizaban para pasear turistas en Tailandia y dejados en su hábitat natural. Esto solo se logró por la poca afluencia de turistas, que dejo a los dueños de los elefantes sin dinero con qué alimentarlos.
De hecho, la pandemia del coronavirus y la crisis por el turismo ha permitido repensar el negocio. Kalampichit, dueño de varios de estos animales, dijo que a partir de ahora, una vez superada la emergencia, la empresa permitirá que los animales deambulen libremente por los jardines y que la atracción sea observarlos y no montarlos.
Después de años de recibir críticas por activistas, Kalampichit dijo que la pandemia del coronavirus “solo aceleró” una decisión que estaba casi tomada. El mundo entero celebra esta decisión y esperamos que sea un ejemplo para otros sectores turísticos.