Luego de una usuaria en Twitter Jessi Dietrich le preguntaba a un veterinario cuál era la parte más difícil de su trabajo. La respuesta le rompió el corazón, debido a que a raíz de esta pregunta el veterinario de Estados Unidos reveló una verdad desgarradora, relacionada con la eutanasia a animales y que encierra un gran valor en ese último momento de sus vidas.
El momento en el que los animales saben que están por morir, sus dueños no resisten acompañarlos cuando son inyectados, lo que genera un trauma aún mas desolador para los peluditos. En los últimos momentos, las mascota suelen ser buscar frenéticamente con la mirada a sus dueños; y eso es desgarrador.
El veterinario pidió por favor que, cuando tengan que tomar la decisión de sacrificarlos, no los abandonen en una sala llena de extraños. Angteriormente la clínica veterinaria Hillcrest, en Sudáfrica, publicó en Facebook un emotivo y poderoro mensaje que invita a los dueños de mascota a acompañarlos hasta el final.
“Cuando usted es dueño de una mascota, es inevitable -la mayoría de las veces- que ellas mueran antes que usted. Cuando tenga que llevar a su mascota al veterinario, para que tenga un final humano sin dolor, quiero que todos sepan algo… usted ha sido el centro de su mundo TODA SU VIDA. Quizás él ha sido solo una parte de la suya, pero todo lo que conoce es a usted como su familia”, se lee en la misiva.
Y añade: “Para nosotros, como humanos, es devastador perderlos pero, por favor, le ruego que NO LOS DEJE. No deje que transiten de la vida a la muerte en un cuarto con extraños, en un lugar que no les gusta. Lo que tienen que saber es que ELLOS LO BUSCAN CUANDO USTED LOS DEJA”.
“Ellos buscan en cada rostro la persona que aman. No entienden por qué los dejó cuando estaban enfermos, asustados, viejos o muriendo de cáncer, y necesitan su consuelo. No sea cobarde, porque piensa que es demasiado para usted. Imagine cómo se sienten cuando los deja en su momento más vulnerable y gente como yo (el veterinario) trata de hacer lo mejor que puede para consolarlos, hacerlos sentir menos asustados y explicarles por qué no pudo (su dueño) quedarse”.